He sido buena y obediente

Me quito mis harapos y me pongo el camisón de cuello alto y los pololos de invierno, sin olvidarme de los peúcos.
Me meto en la cama y apago la luz.
Cierro los ojos y sueño.
Dicen que los sueños son deseos no cumplidos.
...Qué leches. Los sueños, sueños son. No necesito soñar para saber que lo que yo pedí el año pasado a los Reyes, me lo quitaron por defectuoso y no me trajeron nada a cambio.
Lo tengo claro: este año, quiero unas zapatillas de andar por casa. Seguro que me duran más. Y no necesitan pilas.
Etiquetas: sueño
0La nobleza opina
Publicar un comentario
<< Home