Pero qué hacendosas estamos...
Aunque suene a permiso penitenciario, hoy nos han soltado pronto. Lo mismo, a final de mes cuando mire mi nómina, piense en ese par de horitas que pude haber hecho hoy, pero que vamos, que con mi curso online estaba casi deseandito llegar a casa y ponerme a ello. Y en ello estoy, pero necesitaba desconectar un poco, que no sólo de cultura vive el hombre y, como siga culturizándome a este paso, llegaré a ministra. Por lo menos (vamos, que le quito el puesto a Satrústegui y él será mi becario) (whahahahahahahaha, yo que viviré eternamente...)
Tengo sobre la mesa unos cuantos papelotes (unos cientos de hojas recién impresas) que me sirve como apoyo en mi curso. Hombre, me gusta, pero reconozco que a veces soy muy cortita para algunas cosas. Fallo en lo más simple. Así que a pesar de mi dedicación a tiempo completo fuera de horas de trabajo, voy más rezagada que el resto de los alumnos. Pero como que me da igual. Lo terminaré antes o después (y seguramente mucho después que el resto), pero lo importante es llegar hasta el final. Es que si no llego, no me dan el título, y tendría narices la cosa estar horas y horas frente a la pantalla para luego no conseguir nada en claro. O nada en papel que certifique que le he dedicado mi tiempo a algo y que lo acredite para un futuro empleo, que esa es otra.
Ahora para los empleos ya no me descartan, simplemente me ignoran. No me contestan de ningún sitio, seguramente se ha corrido la voz de que yo estoy estoy buscando otro trabajo y se están riendo un poco. Mientras hay vida, hay esperanza, y hasta que me llegue la edad de jubilarme y ya no puedan contratarme, yo seguiré insistiendo, oyes, que una no ha estudiado pa ná. O, al menos, eso intento. Je je je je... qué poco me gusta ya mi trabajo... (pero no se lo digáis a nadie, no sea que me despidan y me quede sin ná)
Así que nada, que yo sigo con mi curso, como buena niña aplicadita. Antes mi madre no entendía para qué tanto cursillo si ya tenía una carrera. Ahora me repite todos los días que cuantos más cursillos mejor, que en cuanto me salga algo mejor que lo que tengo, que salga corriendo. Eso intento, mami, eso intento...
Y como evolución en el blog, me he apuntado a la nueva versión de Blogger. Ole, ahora ya puedo mejorar la usabilidad y todo eso, etiquetar mis posts... Cuando termine con el curso (me tiene absorvida, oiga) enredaré un poco para ver cuánto puede dar más de sí esto. Pero poco a poco, no sea me emocione demasiado...
Niñas, niños... mañana más ¿vale?
Tengo sobre la mesa unos cuantos papelotes (unos cientos de hojas recién impresas) que me sirve como apoyo en mi curso. Hombre, me gusta, pero reconozco que a veces soy muy cortita para algunas cosas. Fallo en lo más simple. Así que a pesar de mi dedicación a tiempo completo fuera de horas de trabajo, voy más rezagada que el resto de los alumnos. Pero como que me da igual. Lo terminaré antes o después (y seguramente mucho después que el resto), pero lo importante es llegar hasta el final. Es que si no llego, no me dan el título, y tendría narices la cosa estar horas y horas frente a la pantalla para luego no conseguir nada en claro. O nada en papel que certifique que le he dedicado mi tiempo a algo y que lo acredite para un futuro empleo, que esa es otra.
Ahora para los empleos ya no me descartan, simplemente me ignoran. No me contestan de ningún sitio, seguramente se ha corrido la voz de que yo estoy estoy buscando otro trabajo y se están riendo un poco. Mientras hay vida, hay esperanza, y hasta que me llegue la edad de jubilarme y ya no puedan contratarme, yo seguiré insistiendo, oyes, que una no ha estudiado pa ná. O, al menos, eso intento. Je je je je... qué poco me gusta ya mi trabajo... (pero no se lo digáis a nadie, no sea que me despidan y me quede sin ná)
Así que nada, que yo sigo con mi curso, como buena niña aplicadita. Antes mi madre no entendía para qué tanto cursillo si ya tenía una carrera. Ahora me repite todos los días que cuantos más cursillos mejor, que en cuanto me salga algo mejor que lo que tengo, que salga corriendo. Eso intento, mami, eso intento...
Y como evolución en el blog, me he apuntado a la nueva versión de Blogger. Ole, ahora ya puedo mejorar la usabilidad y todo eso, etiquetar mis posts... Cuando termine con el curso (me tiene absorvida, oiga) enredaré un poco para ver cuánto puede dar más de sí esto. Pero poco a poco, no sea me emocione demasiado...
Niñas, niños... mañana más ¿vale?
0La nobleza opina
Publicar un comentario
<< Home